Recomendaciones de los pediatras para disfrutar del verano sin sustos

Se habla de golpe de calor cuando la temperatura corporal pasa de los 40° C y se produce por un fallo en el sistema que regula esta en nuestro organismo. La exposición a la luz y la subida de los termómetros pueden causar trastornos, como erupciones en la piel, sensación de fatiga transitoria, calambres y agotamiento por calor. Según recoge la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) en su web, “el agotamiento por calor es el cuadro más frecuente y se debe a disminución del contenido de agua, de sales minerales o de ambas. Esto provoca debilidad, náuseas o vómitos, anorexia, cefalea, mareo, calambres y, con menor frecuencia, ansiedad, irritabilidad, sensación de desvanecimiento o incluso síncope”.
Los pediatras de Atención Primaria se muestran realmente preocupados y creen que es necesario que la sociedad y, sobre todo los padres, se conciencien de que es importante proteger la piel y los ojos del sol. Durante la etapa infantil y adolescente hay que establecer los hábitos saludables dirigidos a la protección solar y a la prevención del cáncer de piel, quemaduras solares y otras lesiones.
También considera que es necesario fomentar la colaboración mediante campañas escolares y comunitarias que promuevan la prevención de la exposición excesiva a la radiación UV en la infancia y la adolescencia. Los efectos de los rayos ultravioleta aumentan por el viento y las propiedades reflectoras de la superficie del suelo (la arena refleja entre un 10% y un 25% de estos rayos), por lo que la exposición de los bañistas es especialmente intensa.
Los niños rubios, de ojos azules y con piel clara son los que precisan una fotoprotección más alta. En este sentido, los pediatras aseguran que utilizar un fotoprotector adecuado durante los primeros 18 años de vida puede reducir hasta un 78% el riesgo de cáncer cutáneo en la edad adulta.
Además, dan los siguientes consejos y recomendaciones de cara al verano:
1. Viajar de forma segura
- Es aconsejable llevar un botiquín para poder tratar pequeños cortes, quemaduras o diarreas.
- Si se viaja a un país europeo, es recomendable solicitar previamente la tarjeta sanitaria europea. Para ir a países exóticos, se debe consultar la posibilidad de poner algunas vacunas recomendadas para esos lugares. Los centros de vacunación de cada provincia se pueden consultar en la web del Ministerio de Sanidad: Centros de Vacunación Internacional.
- Si el trayecto es en coche, hay que utilizar el sistema de retención adecuado, especialmente si se viaja con bebés y es obligatorio cumplir con las normas de seguridad vial.
2. Fomentar la actividad física y los juegos
El periodo de vacaciones es una oportunidad para realizar y fomentar la actividad física al aire libre. Ya que el deporte produce beneficios para la salud de la infancia, enseña habilidades importantes de la vida y aumenta la confianza en uno mismo.
Estos días son también una oportunidad para jugar en familia. Además, el juego tiene un papel importante para favorecer el desarrollo de los niños y nos ayudará a realizar actividad física divertida. Es importante que los juegos y juguetes fomenten la igualdad y que sean seguros.
También es tiempo de piscinas, uno de los lugares preferidos por ellos, en los que podremos disfrutar todos juntos. Es importante seguir las recomendaciones para disfrutar del agua con seguridad.
3. Dedicar tiempo a la lectura
Esta mejora la capacidad y el progreso lingüístico de los niños. No solo inspira su desarrollo del lenguaje sino que también es una buena forma de establecer vínculos duraderos entre padres e hijos. Es muy positivo para ellos que fomentemos la lectura desde edades tempranas. Es una actividad saludable y leerles en voz alta mejora su desarrollo y fortalecerá vínculos afectivos.