Ruta por los puentes de Toledo

La ruta entre puentes de Toledo es uno de los recorridos más recomendados para conocer la ciudad a pie y disfrutar con las vistas y los monumentos. Parte de este camino discurre por la senda ecológica y otro tramo por las calles de la ciudad.

Durante el recorrido se puede observar el Alcázar, el Castillo de San Servando, la Academia de Infantería, los restos del acueducto romano, los restos arqueológicos del baño árabe de Tenerías, el Torreón del Baño de la Cava e incluso el Monasterio de San Juan de los Reyes. Vistas impresionantes con museos y edificios cargados de historia.

El primer puente es el Puente de Alcántara del que se cree que ya existía en la época de los romanos. Está formado por tres ojos o arcos, dos de mayor tamaño y uno más pequeño y en sus dos extremos, dos puertas fortificadas.

Su función ha sido muy importante para la ciudad  en diversas épocas de la historia siendo durante el periodo musulmán el punto de control de acceso a la Alcazaba.

La estructura ha sufrido varios cambios a lo largo de la historia: en el siglo XIII tuvo que reconstruirse casi completamente debido a una enorme riada que lo destruyó y en el siglo XVIII se modificó la portada oriental.

El Puente de San Martín está situado en la zona oeste de la ciudad cerca del Monasterio de San Juan de los Reyes. Está formado por cinco ojos y a los lados cuenta con dos torreones.

Antiguamente existía una Puerta llamada de San Martín en la que se cobraban los impuestos por introducir productos a Toledo. La puerta se construyó en 1864 y se demolió en el 1967.

El puente, al igual que el de Alcántara, ha sufrido modificaciones a lo largo de la historia debido al deterioro y a las guerras. En el siglo XVI tuvo que ser restaurado casi completamente decorando las torres con las armas de la ciudad y con dos imágenes de los reyes godos y en 1575 se reparó la torre de la puerta de San Julián.

El camino entre puentes es largo por lo que se recomienda ir con calzado adecuado y ropa cómoda. En la mochila no puede faltar ni la botella de agua ni la cámara de fotos. Se aconseja evitar las horas centrales del día en verano o días de mucho calor.