Castillo de Bran en Rumanía

El Castillo de Bran, en Rumanía, tiene una historia que data desde principio del siglo XIII. Popularmente, se le conoce como el castillo de Drácula, aunque no es mucho lo que se relaciona con el personaje de Bram Stoker. De todas formas, es un lugar impresionante que, sin duda, te cautivará.

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Castillo de Bran

El castillo de Bran fue en primer lugar una fortaleza de los caballeros de la orden teutónica. Pero ya en el siglo XIV, el rey Luis I de Hungría ordenó que se convirtiera en un verdadero castillo. Durante los siglos siguientes, perteneció a otomanos y valacos, entre muchos otros. Y ya a comienzos del siglo XX, finalmente formó parte de la actual Rumanía. Hoy, el castillo es propiedad de herederos de antiguas realezas y se encuentra abierto al público para su visita como museo.

Es conocido como el castillo de Drácula. Y es que el aire de misterio que lo rodea bien lo podría relacionar con el lugar que habitaba el conde vampiro. Sin embargo, Bram Stoker, el autor de la novela, ubicó el castillo de su personaje ficticio en algún lugar de Cárpatos y no de Bran. Pero, en realidad, que este no sea el verdadero castillo del personaje en quien el autor se basó para crear a Drácula poco importa. El castillo de Bran tiene numerosos méritos propios que hacen que su visita sea indispensable a la hora de recorrer Transilvania.

Este castillo se encuentra en medio de bosques y jardines. Debido a esto, verlo desde fuera de su recinto es muy complicado. Una vez dentro de la zona, te encontrarás con muchas tiendas de souvenirs y restaurantes desde donde ya podrás ver su maravillosa arquitectura.

Visitar el castillo

El castillo de Bran se sitúa al suroeste de Brașov, y a menos de tres horas en coche desde Bucarest. La visita al castillo se organiza en torno al patio interior que contiene el pozo de los deseos. Desde allí podrás recorrer diferentes niveles que se conectan por escaleras y pasillos muy angostos. Sin duda, caminar por estos recovecos es una parte muy importante de la emoción que conlleva la visita. Así, podrás conocer habitaciones como la cocina, los distintos salones, e incluso una escalera secreta. Y en el recorrido tendrás la oportunidad de ver muebles y objetos decorativos muy interesantes.

Además, desde las terrazas del castillo tendrás unas vistas impresionantes del entorno natural. Una de las características de este castillo es que sus formas arquitectónicas son bastante irregulares. Debido a esto, desde cada nivel obtendrás vistas diferentes.

También, algo muy particular del castillo de Bran es que el cuarto piso recrea un espacio virtual donde podrás encontrarte directamente con seres fantásticos y símbolos de miedo que rodean su historia. En ese espacio verás de frente la historia y la evolución de personajes siniestros de la literatura. Y seguramente, también te enterarás de por qué se suele relacionar al castillo de Bran con el conde Drácula.

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